lunes, 20 de junio de 2011

Las 8 claves para emprender

Ser emprendedor es apasionante porque construyes algo de la nada, pero también lo pasas mal muchas veces a lo largo del camino. Llevo 16 años emprendiendo y me enorgullece poder decir que he colaborado en la creación de 6 empresas, disfrutando de muy buenos momentos pero también superando dificultades.
¿Qué he aprendido estos años que te pueda ayudar si empiezas ahora?
Estas son mis reflexiones:
1. Analízate: ¿sirves como emprendedor y como líder?
Ser emprendedor es muy motivador pero no es divertido. Hay momentos duros y difíciles, por eso es imprescindible el apoyo de tu pareja y familia para ser emprendedor.
Para ser un buen emprendedor has de ser buen comunicador y un buen vendedor. Eres el relaciones públicas de la empresa. Te pasas todo el día comunicando y vendiendo: con tu equipo, con tus clientes, con tus socios… Si no te gusta vender, no te metas a emprendedor.
También pregúntate: ¿Eres un buen líder?, ¿Te recuperas pronto de los “noes” y de los fracasos? Porque de esos, los hay cada día. Y además tendrás que absorber gran parte de las penas y quitar estrés a tu equipo, ¿podrás?
Deja de pensar que eres especial y que tu idea es brillantísima: las ideas no sirven de nada, lo importante es la ejecución. Por tanto, deja de preocuparte de que te la roben. Compártela con gente que admires, cuestiónala, pide consejos, pide que te hagan de abogado del diablo, muchos ojos ven más que dos…
Hay que ser humilde y saber decir lo siento a tu equipo, clientes, etc… Porque hay muchas veces que se mete la pata.
Tienes que invertir tiempo en conocer tendencias en todo el mundo, conocer qué se hace en otros países, crea tu blog con tu especialidad, cultiva tu personal branding en las redes sociales, fomenta el networking online y offline.
Y sobretodo: persiste, persiste, persiste…

2.- Tu idea, ¿es una buena idea?
Tu idea ha de ser la solución a un problema. Y cuanta más gente tenga ese problema al que tú vas a dar solución, mejor. Tienes que centrarte en esa idea y no dispersarte. ¿Cuántas cosas se pueden hacer perfectamente? Google no se construyó en un día y siempre se concentró en una idea: ser un buen buscador. Mantén tu plan de negocio sencillo.
3.- El negocio, ¿qué es lo más importante?
Si no hay ingresos, no hay negocio. Trata de ser rentable de inmediato.
Hay que construir un negocio sostenible por sí mismo, y no basado en adquisiciones hipotéticas o imaginarias inversiones de capital. Deja de pensar acerca de “muchos mañanas” y céntrate en “el ahora”. El cash o morir.
No te dediques a hacer planes estratégicos. Dedícate a vender. Intenta empezar siempre con un colchón, pensando que tu empresa no será rentable durante los 3 primeros años.
Divide siempre tus expectativas por 4. Nunca se cumplen los Business Plan. Ten en cuenta que los ingresos serán menores de lo esperado y los gastos siempre serán mayores.
Reduce al máximo tus costes fijos. Si puedes empezar trabajando en el garaje de tu casa, mejor; si puedes contratar freelance, mejor, etc… Al principio, tendrás que pagar salarios bajos.
Construye tu negocio sobre la transparencia de la verdad. Así podrá tener grandes raíces. Y no intuyas lo que puedes medir. En internet se puede medir todo.
Que tu prioridad siempre sea el cliente. La gente quiere que se ocupen de ellos: ¡quieren que les quieran!
4.- El equipo ¿cómo debe ser?
Contrata despacio, despide deprisa.
Piénsalo mucho antes de contratar. Pide referencias de la gente que vayas a contratar en sus anteriores trabajos. Primero, si es posible como freelance, así les conoces bien antes de contratarles en plantilla…y cuando contrates piensa antes ¿es realmente necesaria esa persona?
Si alguien de tu equipo no funciona por lo que sea, piensa que la gente no cambia. Despídela inmediatamente. La gente que mete mal rollo en la empresa, es como un cáncer…
Que el equipo sea flexible, creativo, que tomen la empresa como suya. Que sean SONOPROS: soluciones, no problemas. Y sobretodo: ¡Que les guste vender!
Rodéate de gente mejor que tú y muy diferentes a ti. Promociona la diversidad.
Y… ¡Sé agradecido! Si la gente te da más de lo esperado, dales siempre más de lo que esperan. Ten detalles de generosidad con ellos cuando menos se lo esperen.
5.- El tema técnico, ¿escollo u oportunidad?
Si estás en un proyecto de internet, piensa que al igual que el BP, el tema técnico siempre va peor de lo esperado y que la media de los retrasos están entre 3-6 meses respecto al periodo pactado.
Contrata equipo técnico experto (que venga recomendado por otros clientes) y un buen contrato con penalizaciones si hay retrasos.
El tema técnico puede ser un escollo o una oportunidad. Si le das la importancia que tiene, será una oportunidad.
6.- Socios y ¿un buen abogado?
Sólo uno puede ser el CEO y ha de tener la responsabilidad final. Mejor que sean socios complementarios y compatibles en valores.
Complementarios: si hay uno muy buen comunicador, que el otro sea mejor técnico.
Compatibles en valores como: trabajo, cultura, educación, que le den el mismo valor al dinero…
Hay que redactar un pacto de accionistas y “redactarlo como enemigos para seguir siendo siempre amigos”
El peor defensor de tus intereses eres tú mismo, así que para esta ocasión coge un buen abogado.

7.- La competencia
La competencia es buena. Y si te copian, ¡mejor! Te convierte en un asesino (comercial). Te ayuda a espabilarte y en definitiva a ser siempre mejor y para ello, hay que innovar.
Antes se decía: “al enemigo, ni agua y en el desierto, polvorones”
En un mundo global como el actual me gusta decir: “al enemigo, un vasito de agua, porque nunca se sabe…”
En el futuro, quizás puedas adquirirlos. O ellos a ti, o un tercero más grande a ambos.
El caso es que siempre hay que respetar a la competencia.

8.- Vender o no vender
Si eres un buen emprendedor y te llega una buena oferta de compra de tu empresa: ¡¡¡Vende!!! Con ese dinero, podrás fundar muchas empresas más.
Te dará pena porque te ha costado mucho sacar la empresa adelante y la ves casi como un hijo, pero piensa que es una oportunidad para poder seguir invirtiendo en tu don: “ser emprendedor”, es decir, “tener buenas ideas y ponerlas en marcha”
Y sobre todo vive con pasión y celebra tus éxitos con el equipo. Son los momentos inolvidables en los que te das cuenta de que:
¡Todo el esfuerzo ha merecido la pena! Porque al final si encuentras un trabajo que te gusta, no tendrás que trabajar en toda tu vida.

Elena Gómez del Pozuelo http://www.mujeresconsejeras.com/