martes, 8 de febrero de 2011

La venta puerta a puerta, un refugio para mujeres afectadas por la crisis

Alpematic dispone de esta modalidad de trabajo orientada a la venta a domicilio de sus ambientadores y sistemas de difusión de fragancias, para particulares y pymes.

El origen de la venta directa, por catálogo o a domicilio –denominaciones hay casi tantas como productos que se acogen a ella– es tan antiguo como la humanidad. Los primeros mercaderes y comerciantes ambulantes no entendían nada de conceptos como el marketing viral, pero sabían bien de la importancia del boca a boca para tener éxito.
La Historia está llena de ejemplos que son antecedentes directos de la venta directa. En la antigua Grecia, la mayoría de los agricultores y ganaderos comercializaban directamente sus productos sin la ayuda de intermediarios. En la primitiva Norteamérica, los vendedores yanquis recorrían las tierras salvajes haciendo tratos incluso con los indios. En Francia, los llamados repartidores de flores fueron los primeros en emplear órdenes de venta allá por el siglo XIV. Más recientemente, a mediados del siglo pasado, se hizo famoso el eslógan ‘Avon llama a su puerta’.
Después de tantos años, esta elemental fórmula de comercialización está más viva que nunca y ni siquiera la crisis económica mundial parece hacerle mella. La Asociación de Empresas de Venta Directa hacía balance recientemente del último ejercicio con buenas cifras, tanto de empleo como de pedidos. En concreto, según esta organización –que agrupa a un total de 21 compañías en España–, el número de entregas de productos de sus asociados se ha incrementado en un 16,5%, mientras que el de personas que se dedican a la venta directa en España –la inmensa mayoría de ellas mujeres– ha aumentado un 15,5%.
El secretario general de la asociación, JuanTurró, sostiene que una de las claves de su atractivo está en la «flexibilidad» que implica este trabajo. Así, muchas personas que ahora están en paro optan por colaborar con empresas de venta directa para obtener unos ingresos que, aunque modestos, no requieren de demasiado tiempo. «Todo va ligado: a mayor acción comercial, mejores son los resultados», explica Turró, quien cifra en unos 90 millones de euros la facturación de la venta directa el año pasado sólo en Andalucía.
Andalucía, a la cabeza
En Málaga no hay datos concretos, aunque el secretario de la Asociación de Empresas de Venta Directa asegura que se trata de la provincia con más pedidos junto con Sevilla. Y eso es relevante, si se tiene en cuenta que la región andaluza es la comunidad con mayor volumen de negocio de este sector. Además, de los 153.0000 distribuidores o vendedores independientes que hay en España, 25.000 residen en Andalucía.
«La tendencia de este año 2009 es un aumento en el número de trabajadores, propiciado por el tratamiento más favorable que la Seguridad Social otorga a nuestros vendedores, al abaratarse y reducirse los costes de los autónomos independientes», comenta Turró.
Las propias empresas constatan esta buena evolución del sector. Así, una portavoz de la firma de cosmética Oriflame destaca que Málaga ofrece un gran potencial que ha experimentado un «crecimiento importante», al tiempo que asegura que las ventas en general han aumentado un 13% y el número de socios activos un 15%.
Estas mismas fuentes resumen así las claves del creciente interés por la venta directa: no requiere inversiones previas, supone riesgo cero, genera unos beneficios estables que aumentan paulatinamente según la dedicación y ofrece la oportunidad de un desarrollo personal y profesional a personas sin cualificación concreta.
Desde Oriflame indican que lo más importante para tener éxito en este negocio es una buena relación calidad-precio. «Ahora más que nunca, el cliente no quiere pagar de más, pero sigue siendo exigente con la calidad de los productos que consume», afirman.
Eso sí, Juan Turró reconoce que, pese a que aumentan los pedidos, se ha observado que decrece el importe total que encargan los clientes. «Se gasta menos; es algo común a todos los sectores», afirma.
Thermomix
Margarita Simón, delegada en Málaga de Thermomix, admite que las ventas no han aumentado, pero asegura que su personal sigue teniendo «muchísimo trabajo», ya que su producto sigue estando en auge, «como el lavavajillas hace quince años», dice. Simón menciona que han notado un mayor interés de mujeres que quieren distribuir este robot de cocina –la marca incluso ofrece la posibilidad de pagarlo de esa manera: convirtiéndose en presentadora del producto y captando nuevos compradores–, aunque resalta que, precisamente por eso, ahora tienen que ser más selectivos a la hora de reclutar al personal. «La empresa tiene un prestigio y quiere que las presentadoras estén a la altura. Esto no es lo mismo que vender una barra de labios», apunta.
Por eso, a diferencia de lo que hacen otras firmas, en Thermomix no trabajan tanto con catálogo, sino con demostraciones ‘in situ’ de un aparato cuyo coste ronda los 1.000 euros. «Hay que enfocarlo bien todo; sin una demostración, el cliente muchas veces no se cree lo que esto puede hacer», explica Margarita Simón.
La conocida marca de cosmética Avon también percibe un mayor interés por parte de mujeres que quieren hacerse distribuidoras de sus productos. Lo confirma Sandra Alarcón, una de sus coordinadoras en Málaga: «Antes la gente no se metía tanto en estas cosas.La verdad es que ahora me llaman más, varias veces a la semana. En esta campaña ya he contratado a dos chicas». Y cuantas más vendedoras capte, mejores serán sus beneficios, ya sea en forma de porcentaje de lo que se facture o canjeando productos del propio catálogo de Avon. «En el caso de las coordinadoras, se gana más contratando a gente que vendiendo», revela esta joven.
Las empresas de venta directa esperan que los números no les den la espalda en 2009 después de cinco años de crecimiento progresivo en todo el mundo . «La tendencia del sector es de un aumento modesto pero muy real», asegura el secretario de la asociación que las agrupa en España, desde donde se augura un crecimiento de entre el 5% y el 10% para el presente año.